Desde Pamplona: por la N-121 o la A-15 hasta el cruce de Puente la Reina (NA-601 y después en la Venta de Ucar, carretera NA-6013).
Desde Puente la Reina: por la NA-601 dirección Pamplona hasta el cruce de la Venta de Ucar.
Fiestas y costumbres
Durante los días 14 a 19 de Agosto tiene lugar la celebración de las fiestas en honor de Nuestra de la Asunción, fiestas grandes de Añorbe. Se inician con la subida de la corporación acompañada de la Banda ‘Los Txaparreros’ para celebrar la tradicional ofrenda de flores a la Virgen que realizan todos los niños de Añorbe, tras lo cual la Coral de Añorbe canta la Salve.
Dentro de las tradiciones más destacadas del pueblo que aún perduran en nuestros días, deben señalarse las fiestas de Navidad, con la celebración del día del Niño Jesús de Añorbe como momento más destacado; la Semana Santa, con la procesión del Viernes Santo; la romería a la ermita de San Juan con motivo de la celebración de San Isidro Labrador; las fiestas en honor de las Reliquias, en el fin de semana del Corpus y las fiestas patronales en honor a la Virgen de la Asunción, que arrancan con las vísperas del 14 de agosto. Ya desde tiempos pasados se destacaba la celebración de las fiestas patronales, «…los días del 14 al 16 de agosto con juglares y dantzaris, alardes de armas o soldadescas, comedias y corridas de toros y novillos durante el siglo XVII…» («Toponimia y cartografía de Navarra» Jose María Jimeno Jurío, 1998).
De todas estas celebraciones, merece destacarse la correspondiente a la fiesta del Niño Jesús de Añorbe, celebrada el 1 de enero e instaurada en el siglo XVII por el carmelita Fray Juan de Jesús San Joaquín, vecino del municipio. Es un día de fiesta y de reencuentros, que cobra un carácter especial para todos los añorbeses, que no dudan en participar activamente en la celebración.
También se celebran romerías en San Juan, en la ermita de San Juan en el término de Nekeas y en la ermita de San Esteban el 2 de septiembre.
La víspera de San Juan es una costumbre en el pueblo hacer hogueras y tomar chocolate para celebrar el solsticio de verano.
En los últimos años se ha convertido en una tradición celebrar una cena de mujeres con ocasión del día 8 de marzo, día internacional de la mujer trabajadora y una cena el día 28 de diciembre, día de los Santos Inocentes, en la que se hacen alubias rojas para todos los que quieran acudir.
Por la importante tradición musical de Añorbe, se celebra todos los años Santa Cecilia, el día 22 de noviembre.
Qué visitar
- Restos arqueológicos en el límite de Añorbe con Artajona
- Nevera Medieval.
- Parque de los Molinos.
- Merendero de la Nevera.
- Parque de Boeil-Bezing.
- Ermitas de San Martín, San Juan y San Esteban.
- Centro geodésico de Navarra.
- Canal de Navarra y presa de Artajona.
- Casas blasonadas: Casa de Marichalar, El Palacio, Casa el Herrero, Casa Urrutia, Casa el Rojo, Casa Ederra.
- Casetas de los cazadores.
- Abejera.
- Fuentes de Olazari y Tejería.
- Parque de Aneder.
Arte
Desde el punto de vista artístico, Añorbe ofrece varios puntos de interés. En primer lugar, debe destacarse la iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Asunción, procedente de la unificación en 1528 de dos parroquias preexistentes. Es un edificio del siglo XVI, buen ejemplo de la arquitectura renacentista en Navarra, con una nave de tres tramos irregulares, coro alto a los pies, y cabecera pentagonal. En el tramo anterior al presbiterio se abren dos capillas laterales a modo de crucero. Al exterior la iglesia presenta muros de sillar, destacando la gran torre prismática situada a los pies, y los contrafuertes oblicuos adosados a los lados. El acceso mediante un pórtico neoclásico da buena muestra de las diferentes reformas efectuadas en el edificio con el paso de los años. Pese a ser obra de finales del siglo XVI la reforma más importante fue la reconstrucción de la techumbre, hundida en 1842. En 2007 se ha vuelto a reformar la cubierta exterior de la cúpula.
Aloja en su interior interesantes obras escultóricas entre las que sobresale el retablo romanista, realizado en los últimos años del siglo XVI, dentro de la órbita del taller de Estella. En 1597 Juan de Landa contrataba su pintura y a él pertenece la policromia de los grutescos. El programa recoge figuras de apóstoles, evangelistas, papas y doctores de la Iglesia, enmarcando los temas principales. Relieve de San Miguel que presenta analogías con la obra de Bernabé Imberto y las tallas de la Virgen con el Niño y el grupo de la Asunción, obras muy próximas a las de Anchieta. Para la doctora García Gainza, experta en el tema, «…pieza importante dentro de la escuela romanista Navarra por la calidad de su escultura…». Es un gran retablo de planta recta compuesto de banco con relieves, dos cuerpos superpuestos, de tres calles cada uno separadas por dobles columnas y pilastras, y un calvario a modo de remate. Es un claro programa de exaltación mariana muy acorde con la advocación de la iglesia parroquial.
Aparte de esta obra singular, deben destacarse los retablillos de las capillas anejas. En el lado del evangelio, se encuentran el retablo de las Santas Reliquias, obra barroca de mediados del siglo XVIII, y el de la Inmaculada, también de esa época. Por su parte, en el lado de la epístola, en la denominada capilla de San Blas, se emplaza el retablo del Niño Jesús, antiguamente dedicado a la Virgen del Rosario, obra barroca de mediados del siglo XVII. Junto a él, en el muro testero de la capilla, se encuentra un soberbio crucificado romanista, del siglo XVI, de notable calidad muy relacionado con la obra de Anchieta.
Junto a los retablos, en el coro alto, debe destacarse el órgano, realizado en 1830 por Antonio Gómez de Larraya, considerado como uno de los últimos organeros navarros. Se considera que es uno de los dos últimos instrumentos realizados por un maestro autóctono. Representa el final de la «vieja escuela navarra» de organeros.
Además, debe destacarse la sillería del coro, de quince sitiales, contratada en 1597 por el entallador pamplonés Pedro de Moret, y el facistol, también de Moret, decorado en sus cuatro frentes con motivos decorativos serlianos.
Junto a estas obras, encontramos otras piezas de interés, conservadas en la sacristía, entre ellas varias tallas de los siglos XVI y XVII.
Respecto al caserío del pueblo, son de destacar varias casas blasonadas y dos casas palaciegas del siglo XVII, entre las que sobresale el caserón en el que se alberga el Ayuntamiento de Añorbe. En arquitectura civil, además de los restos tardo góticos, deben señalarse dos palacios con fachadas de sillería y planta irregular del siglo XVII.
Aparte, deben citarse tres ermitas; San Martín, San Esteban y San Juan Bautista, de los siglos XVI y XVII, que contribuyen a dar carácter religioso a los parajes del municipio.
Ya dentro del arte contemporáneo, de los siglos XIX y XX, Añorbe cuenta con dos ejemplos de monumentos conmemorativos de gran interés. Por un lado, la imagen monumental del Sagrado Corazón de Jesús, que preside el pueblo desde las alturas del monte de San Martín, en la espadaña de la ermita homónima situada en su cumbre. Fue instalado en 1947, según proyecto del arquitecto Víctor Eusa, y fue costeado por Dª Juana San Martín Yoldi, perteneciente a una importante familia de Añorbe aunque tras su boda con D.Ezequiel Solana trasladó su residencia a Madrid. Aún viuda nunca olvidó sus orígenes y costeó dicho monumento.
Por otro lado, el monumento conmemorativo erigido en honor del lego carmelita, Hermano Juan de Jesús San Joaquín en 1990, con motivo del cuarto centenario de su nacimiento, obra del escultor navarro José Ulibarrena. Se encuentra ubicado en los aledaños de la iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Asunción.
Riqueza industrial
La mayor riqueza con que cuenta Añorbe es Canal de Navarra, que permite desarrollar la agricultura. La principal producción de Añorbe es la de cereal,olivos,esparragueras y viñedos, cuya producion de uva y olivo se elaboran en la Bodega Cooperativa Nekeas, que comercializa unos vinos de gran calidad, vendidos principalmente en Estados Unidos y otros países de la Unión Europea.